John Gruber es bien conocido por ser uno de los bloggers estadounidenses mejor informados de lo que se cuece dentro de Apple. En el pasado ha tenido acceso anticipado a algunos de sus lanzamientos más esperados y aunque no es infalible (nadie lo es), conviene atender cuando se hace eco de un rumor.
Hoy Gruber ha soltado dos perlas bastante interesantes: Apple está echando el resto con iOS 7 y ha reasignado al proyecto a algunos de los ingenieros que estaban trabajando en OS X 10.9, exactamente igual que ocurrió durante el desarrollo del iPhone original. Además, se dice que los ingenieros de iOS con privilegios para “sacar de paseo” la próxima versión tienen algún tipo de filtro polarizador en las pantallas de sus iPhones para reducir en gran medida el ángulo de visión y dificultar que otros puedan ver antes de tiempo los significativos cambios de interfaz que se están realizando bajo la dirección de Jonathan Ive.
De momento tan solo podemos tratar de imaginar lo que se trae entre manos Ive, pero conociendo el gusto por el minimalismo del vicepresidente de diseño industrial de Apple, tampoco hay que ser ningún genio para aventurarnos a suponer qué caminos tomará la compañía ahora que él es el máximo responsable en interfaz humana tras la marcha de Scott Forstall.
El diseñador Mohamed Kerroudj tiene algunas ideas al respecto, y quizás no se alejen demasiado de la realidad una vez superados ciertos aspectos de usabilidad e interacción que saltan bastante a la vista como los tamaños de letra microscópicos o las acciones poco o nada intuitivas que complicarían la curva de aprendizaje del sistema. Las principales claves serían:
Adios skeumorfismo. Ya hemos hablando en infinidad de ocasiones sobre esta tendencia de diseño cargada de texturas que se esfuerza por imitar los objetos a los que estamos habituados. Siempre se ha dicho que el skeumorfimo fue uno de los principales puntos en los que chocaban las visiones de Ive y Forstall respecto a iOS, y ahora que este último está fuera de la película, Ive tiene vía libre para enterrarlo. Hola minimalismo. Igual nos sorprenden, pero el concepto de Kerroudj bien podría ser un adelanto de lo que llegará. Cuando simplificas una interfaz al máximo y regresas a formas más sencillas pero aún cargadas de diseño es difícil, quizás imposible, dar con algo nuevo. No es casualidad que estos vídeos recuerden en cierta medida a lo que están haciendo tanto Google como Blackberry. ¿Y si pudieras reinventar la rueda? No, no es que Apple vaya a dejarnos necesariamente con la boca abierta con iOS 7, sino que cuando te planteas un rediseño como el que presumiblemente están haciendo, una de las ventajas es que puedes intentar encontrar un mejor modo de encajar todas las piezas. iOS ha ido incorporando infinidad de funciones a lo largo sus seis versiones, y aunque la mayoría están bastante bien integradas y no desentonan con el conjunto, no siempre es el caso. El centro de notificaciones, la barra de multitarea, la pantalla de bloqueo o incluso opciones casi escondidas como la de las fotografías panorámicas pueden encontrar una nueva vida en la próxima versión del sistema operativo móvil de la manzana (o eso espero). Hardware y software cogidos de la mano. Mientras que el diseño del iPhone se ha ido simplificando generación tras generación hasta convertirse en un pulido monolito de aluminio y cristal, el software ha seguido el camino opuesto. Sí, también ha mejorado con cada nueva versión, pero más en el contenido que en la forma. Con Ive controlando ambos procesos de diseño, el del hardware y el software, la fusión de ambos para alcanzar la ansiada armonía será definitivamente uno de los puntos fuertes a explorar.
Vía | Daring Fireball y iClarified
Sitio oficial | Mohamed Kerroudj